LA CAVERNA Y EL DIVINO ANDROGINO: NEUROSIS Y SEXO

LA CAVERNA Y EL DIVINO ANDROGINO: NEUROSIS Y SEXO

He llegado a comprobar que el inconsciente, ese archivo de imágenes, de símbolos de profundo contenido, podía ser también como una memoria milenaria, a la que la teosofia denomina Cuerpo Causal. Eso me hizo pensar en lo que Jung llama el » inconsciente colectivo» o los reencarnacionistas denominan encarnaciones pasadas.

Me ha pasado a mi de ver escrituras o petroglifos en cavernas, que me parecía haber visto anteriormente.. Y he concluido que esos no eran símbolos en sí mismo sino vivencia emblematicas que me recordaban pasadas vidas.

Estas experiencias me han llevado a replantearme el análisis persona y pensar la posibilidad de que estas imágenes nacerian o se generarían en una memoria milenaria que partiría del tiempo de la raza Lémur.

Según la teosofia  y confirmada por teoría modernas ,en tiempo de los Lemures desaparece el andrógino y los sexos se separan.  En ese momento, lo que hoy es el hombre, se hace incompleto y nacería en él la necesidad de completura ( reflexionar sobre el mito de Adán y Eva y nuestra anterior nota sobre la raza Lemur)

El andrógino, muy frecuente en los sueños y la vida cotidiana ,( hombre-mujer), es tratado por Platón en su libro El Banquete o del Amor y aparece cuando ya está avanzada la terapia psicológica  y el paciente está en buena comunicación con sus profundidades donde nacen símbolos que los defino como sìmbolos transpersonales.

Ahora cabría una pregunta ¿ cómo aparecen?. En respuesta diría que las personas en un estado de gran agitación emocional se vinculan con su pasado ontologico y se visualizan a sí mismos con características: hombre-mujer. Les doy un ejemplo: una persona, tiene un conflicto de no saber si es hombre ( masculino) o mujer (femenino) Obviamente su apariencia física es lo real. Alguien con atributos físicos de genero no tendría dudas ( es hombre o mujer), pero el problema se presenta cuando debe juzgar sus inclinaciones psicológicas o sus imágenes mentales , Esclarecer si es femenino o masculino. Creo que el hermafroditismo empieza en la mente y se viste de imagenes, que luego la psiquis le dará el impulso emocional.

Volviendo al ejemplo, esa persona que fisicamente es mujer u hombre , tiene la » duda» de si  es auténticamente tal. En este caso, la persona del ejemplo era una mujer que se ve con caracteristicas femeninas, pelo largo, rubio, pero en ese ensueño dirigido, se imagina  un guerrero romano con brazos y piernas fuertes y manejando una espada que solo un hombre puede tener: y dice , » me siento un andrógino».

Ante este ejemplo he pensado, hasta que punto nosotros no somos un eslabón de una cadena que se remonta hasta quien sabe que principios de la especie. Hasta qué punto esa memoria arcaica, milenaria del hombre, de la especie, se enferma. Hasta que punto nuestras neurosis de hoy no son el producto de nuestro pasado de ronda y cadenas como lo denomina la teosofía. Hasta qué punto no hay circunstancias que gatillan una neurosis latente que traemos de una simbología  heredada por la tragedia de la especie.

NEUROSIS Y SEXO

Tal vez esa neurosis nace junto con la separación de los sexos ( el andrógino dividido en una polaridad: hombre mujer, mujer hombre). Les recuerdo que la Biblia Aramea, habla que Dios creo hombre-mujer( un andrógino) .No me puedo imaginar ¡¡¡ que incompletura debe haber sentido el ser cuando ya no es más omnipotente: que podía autoreprodeucirse, autogestarse y autoabastecerse!!. En ese instante nace una primera rotura, una primera neurosis: no sentirse completo.

Posiblemente es en ese momento que nacería el símbolo como elemento compensador, como elemento misterioso, que si se devela descubrimos el sentido de la vida. Y pensar que todo esto ¡ está en el cuerpo!, que actúa como fusible emocional ante nuestras  angustias existenciales  o explosiones  psicológica.

Podría agregar, con el auxilio de la psicología teosófica, que así como en nuestro psiquismo, en el inconsciente se inscriben todas nuestras emociones , traumas o represiones, todo aquello que no se puede proyectar hacia afuera – generando energías que se manifiestan en símbolos- eso mismo ocurre en el cuerpo. En todo el cuerpo, desde la piel hasta los huesos, se inscriben experiencias. Y estas son más arcaicas porque no pasan por la razón, porque el cuerpo no es razón, el cuerpo es puro inconsciente.

Esas inscripciones corporales que se generan en el momento que somos gestados o tal vez desde antes de eso. posiblemente sean las responsables de nuestras contracturas, de nuestros vicios posturales, de las trabas físicas, enfermedades, reumaticas, etc Éstas bloquean las energías corporales.

Hay que integrar  cuerpo y mente. El trabajo corporal, como el  chi kung, o el Do In, permite la liberación de imágenes, el análisis de esas imágenes permite incorporar el cuerpo a la mente y viceversa.

Ese es un método que se utiliza en Plenitud, no sólo integrando  mente y cuerpo, sino lograr la reconciliación de los opuestos mediante la profundización de la reflexión para lograr el tan anhelado sentido de la vida con lo que terminan los conflictos de identidad entre mujer y hombre , hombre mujer. El Divino Androgino, es un reflejo, un rayo de la Divinidad; el andrógino no tiene nada que ver con el sexo, sino que es trascender el sexo aun siendo poseedores del mismo. Cuando en la teología se representa al Infierno quemando a todos los seres, debo aclarar con Aldous Huxley, en su introducción al Bhagavad Gita, que lo que se quema en el Infierno es el yo personal, el yo separatista, que no nos permite vivir el amor en su magnifica dimension divina.

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One Response »

  1. Impecable, maestro…admirada como planteas un tema tan complejo desde el conocimiento teosofico, con claridad y sabiduría. Gracias!

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