Las dos mentes: una aproximación teosófica

Las dos mentes: una aproximación teosófica

El ser humano transcurre su existencia en una permanente encrucijada entre el deber y el deseo.

A este eterno conflicto, Sankara -filósofo hindú- lo definió diciendo: «al hombre no hay que enseñarle lo que ya sabe, sino ayudarlo a que lo aplique».

Esta dicotomía entre saber y querer, tiene origen en la mente. Si bien la mente, para la teosofía, es Una -simbolizada con una esfera «flotando» en medio de una sustancia densa- en la práctica se percibe como doble.

Imaginen una circunferencia dividida por el medio. A la parte superior podríamos llamarla mente filosófica, altruista, universalista; a la inferior, como mente concreta, es la que actúa en el mundo objetivo y hace las veces de intermediaria cuando queremos elevar nuestro campo de conciencia.

El filósofo y teósofo Sri Ram nos sugería imaginar que la luz que ilumina la esfera (la mente) viene desde arriba, de este modo quedaría iluminada en su parte superior, semi iluminada en el medio y oscura abajo.

En analogía con el «Paradigma de la Linea» de Platón la parte superior estaría plenamente iluminada, sería el mundo de las Ideas Perfectas; en la parte intermedia se mezclarían las cosas objetivas y  la parte inferior, estaría vertida hacia las cosas materiales,  emocionales y concretas.

En la zona de la mente donde se mezclan los valores con los deseos es donde se origina el conflicto entre el saber ( la parte superior de la mente) y el querer (la zona inferior de la mente).

El origen de la imaginación y la fantasía

La división entre los dos hemisferios de la mente (de los que los hemisferios cerebrales son sólo su reflejo) son llamados por la teosofía  imaginación y fantasía.

La imaginación, para la doctrina, es la facultad de captar o emitir imágenes, conceptos y también generar imágenes. Combinar y recombinar los elementos de que dispone y lograr nuevos aspectos de cualquier idea o concepto. En teosofía la imaginación es la capacidad de plasmar, o sea llevar a la realidad objetiva, esas imágenes subjetivas de manera voluntaria y armónica.

En cambio, cuando esas imágenes nacen por sí solas, en forma errática sin control, carentes de voluntad, a eso la teosofía le llama fantasía. Se enseña que muchas de nuestras fantasías surgen de la pereza mental, de no lograr fijar la mente, dejarla en permanente fluctuación sin concreción alguna.

Veamos un ejemplo: supongamos a dos individuos que identificaré como A  y  B.

Al individuo A se le «ocurre» hacer un busto de San Martín. Su primera elaboración se efectuará en el plano de la mente superior. Allí nacerá la idea de cómo era San Martín. Luego, en un segundo paso desea tener el busto; es decir la idea ha tomado impulso y desciende al plano emocional. Seguidamente se pone a pensar sobre los elementos necesarios para llevarlo a la práctica; la idea impulsada promueve a la acción que ya está en el plano objetivo y busca  la recombinación de los elementos. Por último el busto está construido. La idea se ha transformado en una realidad objetiva, ya se encuentra en el plano físico y nosotros podemos admirar la obra de arte.

Veamos ahora al individuo B, a este también se le ocurre hacer un busto de San Martín. pero como le falta la imaginación certera, surge en él el deseo que se transforma en una fantasía, y por lo tanto su idea de cómo era el celebre héroe argentino, resulta errada, disfrazada por el mero deseo.

Ahora bien, el proceso continúa igual que en el individuo A hasta el plano emocional (astral, le dice la teosofía) pero cuando tiene que pasar a la acción, el individuo desiste y abandona el proyecto. Ha muerto un sueño nacido del mundo superior de la mente.

Por eso dice teosofía «no hay peor herejia que matar un sueño». Y este pensamiento tiene un sentido porque los cadáveres de los sueños son ocupados por los «elementales» , que toman la energía de la fantasía para seguir vivos en el plano invisible.

¿Qué es lo que causa la fantasía?¿Quién la impulsa?

Para contestar estas preguntas estudiaremos a los Elementales. Recuerda suscribirte para recibir los artículos en tu correo electrónico. Hazte fan en Facebook y continuemos con la conversación.

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